Por Carlos Piñero
No podemos preocuparnos por nada ni por nadie; solo ocuparnos de nosotros mismos y compartir. La persona que de verdad quiere vivir su cambio será parte él a su manera y forma.
La vida es aquí y ahora, no mañana, no allá. Repito: no te preocupes, ocúpate.
Deja de justificarte indefinidamente por lo que ya fue y no es. Si ya no es, es porque no estás haciendo nada por ello.
Mi proceso es mío, yo lo siento y vivo; nadie puede decirme qué hacer cuando lo he vivido y, sobre todo, sentido, yo.
La vida es infinita, pero la experiencia humana es única, y después vendrá otra experiencia en algún lugar del universo. Por ahora, estás aquí, y cuando amas lo que haces, entonces sabes que es para ti, y cuando te funciona, ¡se nota!, y entonces puedes dar consejos y guía.
Cada persona toma sus decisiones a partir de lo que sabe. El miedo es la gran fuerza que detiene a muchas personas a vivir su vida tal como es. Nuestro mundo requiere amor y solo dándotelo y sintiéndolo tú mismo puedes darlo cuando es requerido.
Yo me he estado ocupando de mí, de mi entorno y todo a mi alrededor, y agradezco la infinita presencia divina del Universo en todo lo que me rodea, desde el momento que despierto hasta que voy a dormir, e inclusive en mis sueños conecto con algo infinitamente inexplicable.
Ocúpate de ti, evita juzgar a los demás porque no son como tú ni piensan como tú. Solo sé tú.
Carlos Piñero