Por Susana Gracida
Hace algunos días, caminando la noche, de repente, me sentí como si fuera una extranjera en la Tierra a la cual le ha sido concedido solo un tiempo para experimentar qué se siente sentir…
Y entonces, claramente, se me dice:
“Solo es un tiempo el que estarás aquí; puede ser corto o largo según lo vivas, ya que el tiempo es relativo. Piensa que, este, tiene un término así que valora el respirar, el Sol en la piel, el desamor, las pérdidas, los encuentros y los desencuentros.
De lo que depende de ti, no guardes rencores, dañan tu vehículo. Deja atrás el miedo al dolor pues este te impide gozar del amor. Abre bien los ojos ya que, a veces, te pierdes de grandes oportunidades de crecimiento y gozo.
Recuerda que te vas a ir, no tiene caso tratar de retener a nada ni a nadie, porque nadie ni nada te acompañará físicamente cuando te reintegres a la esencia; ya que todo regresa a la Fuente.
Evita juzgar las experiencias, eso crea dualidad. Solo ¡vive!
Eres solo un visitante, encuentra la felicidad en la simplicidad… Respira.”
Susana Gracida